Hay varios tipos de escritores, pero muy primitivamente se pueden englobar en dos grandes conjuntos. El primer y más extenso grupo está constituido por aquellos apasionados del lenguaje, que estudian una carrera formal y que se dedican en cuerpo y alma a escribir una novela durante años, con la eterna esperanza de que en algún momento y después de reescribirla veinte veces, sea aceptada por una editorial de renombre medio.
El segundo grupo está formado por aquellos escritores genialmente desequilibrados, cuyos malestares psíquicos les hacen desarrollar una sensibilidad sobrehumana. Esto les permite, mediante un proceso a veces incluso de escritura automática, desarrollar una novela en un tercio del tiempo y con una calidad exponencialmente superior a las presentadas normalmente por el primer grupo.
Reprise, la ópera prima de Joaquim Trier, cuenta la historia de dos amigos escritores, el primero, Erik, perteneciente al grupo de los trabajadores y constantes, mientras que el segundo, Phillip, magistralmente interpretado por Anders Danielsen Lie, es el genialmente desquiciado.
La cinta comienza cuando ambos dejan en el buzón los manuscritos que componen sus primeras novelas. Días después, predeciblemente, la de Phillip es aceptada y la de Erik es rechazada.
Mientras Phillip lidia con la fama, Erik reescribe una y otra vez su novela con la esperanza de que esta sea aceptada. Con el paso del tiempo, vamos conociendo la historia de amor obsesiva que mueve el intelecto de Phillip, cuya idea de que todo sucede por una razón lo ata compulsiva y destructivamente al que considera el amor de su vida. Paralelamente se desarrolla la historia de Erik, que funge como una especie de figura paterna o de control para Phillip, al que quiere tanto como envidia.
Reprise es un filme extremadamente recomendable en todos los sentidos, tiene un guión fresco que retrata y disecciona a las mil maravillas la experiencia creativa desde puntos de vista totalmente diferentes, las actuaciones de los protagonistas y del resto del elenco son fantásticas, el manejo de la imagen está en extremo cuidado, el soundtrack es digno de comprarse y el drama que termina creándose es manejado con maestría hasta alcanzar una conclusión inmejorable. Si tienen oportunidad de verla en algún lado no duden, es un must see.