El cómic como forma de arte reconocida ha tomado mucha fuerza en las dos últimas décadas. Las novelas gráficas cada vez exploran temas más complejos y profundos, mientras que los dibujantes que las ilustran han adquirido fama y fortuna, desarrollando estilos propios e innovadores que dan una gran frescura a este arte en vías de desarrollo.
Conforme la generación que solía leer a Superman y Batman en los cincuentas creció, la demanda por guiones más complejos en formato cómic generó un nuevo movimiento de historieta para adultos, del que podemos destacar a pioneros como Robert Crumb (Fritz the Cat) y Harvey Pekar (American Splendor).
El filme American Splendor, cuenta en un fantásticamente logrado tono documental mezclado con actuaciones, la vida del escritor Harvey Pekar, un hombre tremendamente excéntrico que durante toda su vida trabajó como archivador en un hospital y que documentó absolutamente todos los aspectos de su vida en el célebre cómic American Splendor.
El carácter completamente depresivo de Pekar lo inspiraba para escribir incisivos guiones acerca de la sociedad norteamericana, en los que él era el personaje principal, sin embargo su imposibilidad para dibujar lo obligaba a hacer storyboards con simples monos de palitos, hasta que Robert Crumb se ofreció a ilustrar sus guiones y lanzarlo a la fama.
La película, dirigida por el reconocido dúo de documentalistas conformado por Shari Springer Berman y Robert Pulcini, cuenta con tres reencarnaciones de Pekar, la primera interpretada por el brillante Paul Giamatti, que actúa de forma impecable los pasajes más importantes en la vida del escritor, la segunda interpretada por el propio Pekar, que narra y comenta muchas de las escenas y la tercera el personaje del cómic, que se transforma físicamente dependiendo del dibujante, pero que mantiene siempre su desconcertante personalidad.
En cierta forma, la historia que cuenta el filme tiene mucho que ver con el amor y la relación que mantiene Pekar con la que ahora es su actual esposa, la empleada de una tienda de cómics, cuyo fanatismo y admiración por American Splendor la lleva a contraer matrimonio casi sin pensarlo con la mente detrás de la obra.
Filmada de forma espléndida, American Splendor es una muy grata sorpresa que reflexiona intensamente acerca de los caminos que encierra la mente creativa y la obsesión que conlleva la creación literaria. Por desgracia la cinta no recibió demasiada atención por parte de las distribuidoras a pesar de su rotundo triunfo en Sundance y se quedó simplemente como un objeto de culto en algunos círculos reducidos, sin embargo es una película altamente recomendable.